Tocar a tiempo o llevar el ritmo correctamente es una de las cosas más importantes a la hora de tocar la guitarra. Piensa que el baterista o el metrónomo, son tus jefes y tienes que obedecer sin protestar, seguir sus indicaciones pero no por ello tiene que ser algo tedioso o aburrido.

Para lograr nuestro objetivo vamos a combinar unos consejos para llevar con tu guitarra un acompañamiento firme, estable y con gracia:

Contar: Empieza contando, solo tienes que saber contar hasta 4 porque la mayoría de las canciones están escritas en 4/4. Ponte la canción o ejercicio que te estés aprendiendo y cuenta 1, 2, 3 ,4, 1, 2, 3, … verás como todo encaja a la perfección. Puedes contar en alto mientras tocas, despacio, para después contar en silencio.

1, 2, 3, 4 !! Ilustración: Ladrón

Metrónomo: Es como el profesor malo, duro y estricto, pero es el mejor. Practica con metrónomo, si estás tocando canciones puedes sustituir el metrónomo por la pista de batería (siempre que se pueda) para tocar de una forma más cercana a la realidad.
Si estás tocando ejercicios toca siempre con metrónomo y sobre todo bájate la velocidad hasta que lo toques perfecto, como si lo tocas a 40 bpm. Después vas incrementando la velocidad.

No soy tan malo, soy tu amigo

Pie: Prueba a llevar el ritmo con el pie como si estuvieses tocando el bombo de una batería. Al no ser una claqueta estricta la cosa gana en naturalidad y espontaneidad siempre y cuando no se noten tirones muy grandes.

Muchachito Bombo Infierno sabe como atizarle a la guitarra y al bombo

Palmas: Cuando tengas problemas con ciertos compases y te estés haciendo un lío, deja la guitarra a un lado y prueba a dar palmas mientras tarareas tu parte de guitarra. Esto te sirve para ver si los acordes o notas tienen una duración perfecta en los compases y para darte cuenta de los errores. También puedes golpear otros objetos como si fuera una batería, la mesa, bolígrafos, emplear shakers, etc.

Percusión barata y efectiva, pa qué más

Cantar: Ponerte a cantar y tocar al mismo tiempo es una tarea que cuesta al principio pero al final se consigue. Además de ser muy satisfactorio la melodía de la letra te obliga a ir a tiempo por narices. También puedes cantar y llevar el ritmo con el pie por ejemplo.

Al final con la práctica y el tiempo lograrás interiorizar el ritmo de tal manera que a veces te ayudarás del pie para no perderte, otras veces te fijarás más en el batería, pero sobre todo sentirás el ritmo de la música de forma inconsciente y fluirás de forma natural como Bruce Lee. Be rythm my friend.

Más tutoriales que pueden interesarte:

– 5 Rasgueos para mejorar tu mano derecha 
– Qué es 4/4, 3/4, 6/8,… Patrón Ritmo 
– El acompañamiento para tocarlo todo