En este vídeo vamos a explorar un enfoque poco habitual para tocar blues acústico: una progresión de acordes conocida pero que lleva un patrón de notas en el bajo fuera de lo común y suena increíble. El efecto que se crea es una especie de contrapunto en el que da la impresión de que hay varias guitarras.

Esto se debe en parte a que el patrón de bajo utilizado es poco habitual en la guitarra y más utilizado en blues para piano. Es lo que podría perfectamente tocar un pianista con la mano derecha llevando el bajo durante un blues en Mi mayor. Precisamente por eso es algo más complicado de lo habitual y no es recomendado para un nivel principiante sino más bien para medio/avanzado.

Si estás empezando con el blues acústico esta pieza puede ser demasiado complicada, lo mejor es que empieces por algo más sencillo por eso te proponemos que eches un vistazo a nuestros cursos de blues acústico, tanto para nivel principiante como intermedio.

Aquí tienes el TAB.

A veces, cuando tocamos la guitarra, creemos que para sonar bien hay que aprender acordes complicados o cambiar constantemente de posición. Pero la realidad es que, en el rock y el blues, muchas veces lo más simple es lo que mejor suena. En este tutorial trabajamos con un solo acorde —Mi mayor— y lo convertimos en un ritmo poderoso y lleno de groove, inspirado en el estilo de bandas como T. Rex.

En lugar del clásico blues shuffle de 12 compases, aquí exploramos cómo crear variaciones rítmicas usando únicamente un acorde. Empezamos con un patrón base muy fácil de ejecutar y, a partir de ahí, vamos incorporando pequeñas variaciones que le dan frescura, energía y un toque profesional. Todo sin movernos de la tonalidad de Mi, ideal para quienes quieren mejorar su rítmica sin complicarse.

Si este tipo de lecciones te resulta útil y quieres profundizar más, te recomendamos nuestro curso online “30 Ritmos Imprescindibles Blues Rock”, donde encontrarás ideas similares organizadas paso a paso, con vídeos y ejercicios prácticos para mejorar tu dominio del ritmo con la guitarra eléctrica o acústica. Ideal para convertirte en un guitarrista sólido y versátil.

Aquí tienes el TAB.

Este tipo de ejercicios son perfectos tanto para guitarristas que están empezando como para quienes ya llevan tiempo tocando pero quieren reforzar su control del ritmo y el groove. Además, trabajar sobre una base sencilla permite centrarse en la expresión y en los matices, algo fundamental en estilos como el blues y el rock clásico.

No olvides que muchas veces, la magia está en lo simple. Un solo acorde puede darte horas de música si sabes cómo sacarle partido. Y este vídeo es la prueba perfecta de ello.